martes, 18 de agosto de 2015

VERSÍCULOS BÍBLICOS SOBRE LA HOMOSEXUALIDAD

Con este escrito quiero contestar la pregunta del "pastor" Carl Lentz, de la iglesia Hillsong en New York. Respecto a la prohibición del homosexualismo en la Biblia; y si Cristo habló del tema con la gente. Desconozco la clase de biblia que tenga este sujeto y me atrevo a pensar que ni moral tiene para corregir, exhortar y enseñar sobre todo con el ejemplo a su apreciable congregación sobre la OBEDIENCIA Y SANTIDAD al Padre Celestial. Me he quedado muy sorprendido cuando me encontré con varios grupos de "cristianos" que defienden la homosexualidad.

Al convertirme a Cristo pensé que ciertas cosas fueron tan claras en la Biblia que sería prácticamente imposible malinterpretarlas. Me refiero a asuntos tan evidentes como el robar, la lujuria, la idolatría y… claro está… la homosexualidad.

Así que, ¿es bueno ser gay? ¿Qué dice la Biblia?

Hoy sólo quiero presentar una lista de pasajes bíblicos que hablan directamente sobre el tema de la homosexualidad. Una cosa que he visto en aquellos creyentes que defienden el matrimonio gay en particular y la homosexualidad en general es que tienen muy poco respeto por las Sagradas Escrituras. Ese hecho me ha preocupado mucho. No podemos olvidar que la Iglesia cristiana está fundada sobre la Palabra de Jesús el Mesías (Yahshúa ha Mashiaj); no sobre las opiniones de paganos que viven en el siglo XXI. Si no hablan conforme a la Palabra de Dios, es que no hay luz en ellos (Isaías 8:20).

A ver qué dice la Biblia…

ANTIGUO TESTAMENTO

01.- Génesis 19:1-11Para resumir un poco, dos ángeles del Señor condenaron a los moradores de Sodoma y Gomorra dejándolos instantáneamente ciegos porque querían violarlos en grupo.

02.- Levítico 18:22, “No te echarás con varón como con mujer; es abominación”.

03.- Levítico 20:13, “Si alguno se ayuntare con varón como con mujer, abominación hicieron; ambos han de ser muertos; sobre ellos será su sangre”.

04.- Deuteronomio 23:17, “No haya ramera entre las hijas de Israel, ni haya sodomita de entre los hijos de Israel”.

05.- Jueces 19:16-24Es otro pasaje largo que demuestra las acciones pervertidas de un grupo de benjamitas que querían violar en grupo a un hombre. Sus actos fueron condenados como sumamente malos.

06.- 1 Reyes 14:24, “Hubo también sodomitas en la tierra, e hicieron conforme a todas las abominaciones de las naciones que el Señor había echado delante de los hijos de Israel”.

07.- 1 Reyes 15:11-12, “Asa hizo le recto antes los ojos del Señor, como David su padre. Porque quitó del país a los sodomitas y quitó todos los ídolos que sus padres habían hecho”.

08.- 1 Reyes 22:43, 46, “Y anduvo Josafat en todo el camino de Asa su padre sin desviarse de él, haciendo lo recto ante los ojos del Señor […] barrió también de la tierra el resto de los sodomitas que había quedado en el tiempo de su padre Asa”.

09.- 2 Reyes 23:3, 7, “Y poniéndose el rey en pie junto a la columna, hizo pacto delante de Jehová, de que irían en pos de Jehová, y guardarían sus mandamientos, sus testimonios y sus estatutos, con todo el corazón y con toda el alma, y que cumplirían las palabras del pacto que estaban escritas en aquel libro. Y todo el pueblo confirmó el pacto. […] Además derribó los lugares de prostitución idolátrica que estaban en la casa de Jehová, en los cuales tejían las mujeres tiendas para Asera.”

NUEVO TESTAMENTO
A lo mejor estás pensando, “Bueno, todo eso se trata del Antiguo Testamento. Ahora estoy bajo la gracia. No me hace falta hacer caso al Antiguo Pacto”. Aquí tienes, pues, otra lista de pasajes del Nuevo Testamento que enseñan la perspectiva de los primeros cristianos sobre la homosexualidad. Llamemos esta perspectiva, ‘la perspectiva de gracia’…

10.- Romanos 1:26-27, “Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza, y de igual modo también los hombres, dejando el uso natural de la mujer, se encendieron en su lascivia unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos hombres con hombres, y recibiendo en sí mismos la retribución debida a su extravío.”

11.- 1 Corintios 6:9, “¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones”.

12.- 1 Timoteo 1:9-10, “Conociendo esto, que la ley no fue dada para el justo, sino para los transgresores y desobedientes, para los impíos y pecadores, para los irreverentes y profanos, para los parricidas y matricidas, para los homicidas, para los fornicarios, para los sodomitas, para los secuestradores, para los mentirosos y perjuros, y para cuanto se oponga a la sana doctrina”.

13.- Judas 7, “Como Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas, las cuales de la misma manera que aquéllos, habiendo fornicado e ido en pos de vicios contra naturaleza, fueron puestas por ejemplo, sufriendo el castigo del fuego eterno”.

14.-Es muy posible que el término fornicario empleado en Efesios 5:5, Hebreos 13:4, Apocalipsis 21:8y 22:15; se refiera al pecado de la homosexualidad. En los cuatro casos citados, los fornicarios sufrirán bajo la ira feroz del Todopoderoso debido a su inmoralidad sexual.

CONCLUSIÓN
Hoy, honestamente, no creo que haga falta añadir ningún comentario personal. Dejaré que la Palabra de Dios hable por sí misma.

¿POR QUÉ FUERON DESTRUIDAS SODOMA Y GOMORRA?

   La respuesta tradicional es que fueron destruidos por la inmoralidad sexual, pero si lanzas esta misma pregunta a los teólogos gais, la respuesta que te dan será marcadamente diferente. Las tres respuestas más citadas dentro del campo pro-homosexual son:

  1. Fueron destruidos porque no cuidaban a los pobres.
  2. Fueron destruidos porque querían violar en grupo.
  3. Fueron destruidos porque no eran hospitalarios.

En cierto sentido, las tres respuestas llevan algo de la razón. De hecho, la primera razón está sacada directamente de la Biblia y por eso es la más convincente de las tres.

 Empecemos, pues, con la primera respuesta.
1.- Fueron destruidos porque no cuidaban a los pobres:

La primera razón propuesta por la teología Queer es que los sodomitas fueron destruidos porque no cuidaban a los pobres. Aquí apelan a los escritos de Ezequiel.
Ezequiel explica la razón por la que Sodoma fue destruida: “Vivo yo, dice el Señor, que Sodoma tu hermana y sus hijos no han hecho como hiciste tú y tus hijas. He aquí esta fue la maldad de Sodoma tu hermana: soberbia, saciedad de pan y abundancia de ociosidad tuvieron ella y sus hijas; y no fortaleció la mano del afligido y del menesteroso” (Ezequiel 16:49).

Bíblicamente hablando, es cierto que Dios destruyó la ciudad de Sodoma por no cuidar a los pobres (entre unas cuantas cosas más). No obstante, es importante seguir leyendo hasta el siguiente versículo para captar toda la verdad. Es precisamente este versículo que no se cita muy a menudo en la reflexión teológica gay: “Y se llenaron de soberbia e hicieron abominación delante de mí y cuando lo vi las quité” (v. 50).

El término más importante del versículo 50 es abominación. Interesantemente Ezequiel emplea el sustantivo en el singular (toevah) y no su forma plural. Es bien probable que el profeta saque el término del libro de Levítico, el cual emplea la palabra toevah seis veces.

En Levítico, se usa cuatro veces en plural y dos veces en singular. Los dos textos que emplean el singular se refieren exclusivamente al pecado de la homosexualidad, a saber, Levítico 18:22 y Levítico 20:13. Ezequiel, entonces, hace una conexión lingüística entre la enseñanza de la Ley de Moisés y la maldad sexual cometida por los sodomitas.

Fue tal abominación la que impulsó a Dios a quitar a Sodoma de sobre la faz de la tierra. El libro de Levítico explica que los cananeos fueron castigados por el Señor debido a semejante libertinaje sexual.

Después de advertir a los hebreos sobre la importancia de la ética sexual, Dios les dice: “No hagáis ninguna de estas abominaciones, ni el natural ni el extranjero que mora entre vosotros (porque todas estas abominaciones hicieron los hombres de aquella tierra que fueron antes de vosotros, y la tierra fue contaminada); no sea que la tierra os vomite por haberla contaminado, como vomitó a la nación que la habitó antes de vosotros” (Levítico 18:26-28).

¡Más claro no podría ser! Dios los juzgó por sus desviaciones sexuales de la misma forma que lo hizo con los sodomitas; no por su falta de interés por los pobres.

 2.- Fueron destruidos porque querían violar en grupo

 La segunda razón ofrecida por la teología gay es que Dios destruyó Sodoma y Gomorra porque querían violar en grupo.
Ahora bien, esta razón no es tan fuerte como la primera porque no se halla en la Biblia. Es algo que la comunidad gay ha inventado. Evidentemente Dios está en contra de la violación en grupo. Hasta allí todos estamos de acuerdo. Pero esto no significa que Dios esté de acuerdo con la actividad homosexual. Y de todas formas, Dios quiso destruir las ciudades por su maldad continúa; no por un solo acto de violación (Génesis 18:20 y 2 Pedro 2:8).

Génesis 19 forma parte del libro de Génesis. Por lo tanto, es imposible entender el capítulo 19 sin conocer el mensaje del resto del libro. Los primeros dos capítulos de Génesis explican que en el principio Dios creó a un varón a y una mujer conforme a Su imagen y semejanza.

El matrimonio es un reflejo de la belleza trinitaria de Dios. Además, el Señor decretó que la primera pareja procrease. Una pareja homosexual no representa el plan perfecto de Dios ni puede cumplir con su mandato de reproducir. Cuando el autor de Génesis 19 describe el pecado de Sodoma y Gomorra, ya ha establecido que la heterosexualidad es un don de Dios en los primeros dos capítulos del libro. Cualquier otra expresión sexual es una desviación de su diseño original.

Así que es cierto que está mal violar; sin embargo, el mensaje de Génesis es que la sexualidad es para un hombre y una mujer bajo la bendición de Dios. Los hombres de Sodoma querían violar a dos hombres: “¿Dónde están los varones que vinieron a ti esta noche? Sácalos para que los conozcamos” (Génesis 19:5). No creo que haga falta explicar lo que quiere decir conozcamos aquí, ¿verdad?

Lot identificó la violación homosexual como un gran mal. Dijo, “Os ruego, hermanos míos, que no hagáis tal maldad” (Génesis 19:5). Sabemos que se refiere al pecado de la homosexualidad porque enseguida les ofreció a sus dos hijas; no a sus yernos.

Hasta los sodomitas sabían que la actividad homosexual fue una perversión terrible: “Ahora te haremos más mal que a ellos” (Génesis 19:9). Querían violar a Lot también. Su pecado fue tan depravado que los ángeles los castigaron con ceguera.

Esta segunda respuesta carece de peso porque no toma en cuenta la naturaleza incesante y perpetua del pecado de Sodoma y Gomorra. Dios no los juzgó por un acto aislado; sino por un estilo de vida totalmente entregado al vicio.

 3.- Fueron destruidos porque no eran hospitalarios
La tercera razón y tal vez la interpretación más popular formulada por la teología homosexual es que Dios destruyó Sodoma y Gomorra porque no eran hospitalarios.

 A primera vista parece una propuesta lógica. Pero el problema es que no es fiel al relato bíblico. Génesis 13:13 estipula que, “Mas los hombres de Sodoma eran malos y pecadores contra el Señor en gran manera”. De nuevo, Génesis 18:20 pone, “Por cuanto el clamor contra Sodoma y Gomorra se aumenta más y más, y el pecado de ellos se ha agravado en extremo, descenderé ahora”.
El texto bíblico está hablando de una especie de pecado más allá de lo común y corriente. ¿De verdad la falta de hospitalidad sería una señal de que su pecado se había “agravado en extremo”? ¿Te parece creíble, viable? ¿Acaso no sería la violación en grupo un pecado muchísimo más ofensivo? ¿Dónde condena Dios la falta de hospitalidad en términos de vida o muerte?

Cuando Lot estuvo a punto de entregar a sus dos hijas a los hombres de Sodoma, no lo hizo con el fin de que los varones aprendiesen a ser más hospitalarios. Y si pensamos un poco, los ángeles ya tenían una casa dónde pasar la noche –la casa de Lot- por lo tanto no necesitaban depender de la hospitalidad de la ciudad.  Pregunta Marcela Carmona, “¿Acaso los ángeles estaban necesitando hospedaje?”
Otro dato de interés: los teólogos pro-homosexuales se olvidan de que Dios destruyó Gomorra y otras ciudades vecinas también (Judas 7). ¿Dónde leemos que los habitantes de estas ciudades fueron inhospitalarios? Eso de que Dios destruyó las ciudades por no ser hospitalarios es una respuesta bien rebuscada. ¿No te parece?

 Independientemente de lo que creemos, la buena noticia es que hay dos textos en el Nuevo Testamento que explican claramente la razón por la que Dios los destruyó. Pedro hace mención de su impiedad, su nefanda conducta, sus hechos inicuos, “aquellos que, siguiendo la carne, andan en concupiscencia e inmundicia, y desprecian el señorío” (2 Pedro 2:6-10).
Y luego Judas es aun más explícito: “habiendo fornicado e ido en pos de vicios contra naturaleza [homosexualidad], fueron puestos por ejemplo, sufriendo el castigo del fuego eterno” (Judas 7).

 A lo largo de toda la Biblia, el término sodomita llega a ser sinónimo de homosexual. Como predicó Voddie Baucham, “El pecado de Sodoma fue la sodomía”. Hay muchos otros textos bíblicos que condenan un estilo de vida gay. Dios se opuso a la actividad homosexual en los días bíblicos y sigue oponiéndose a ella hoy día.

Conclusión

 Con todo, las tres propuestas de la teología gay contemporánea no son satisfactorias.
  • Sodoma y Gomorra no fueron destruidos por no cuidar a los pobres, sino por COMETER UNA ABOMINACIÓN que corresponde al pecado homosexual nombrado en Levítico.
  • Sodoma y Gomorra no fueron destruidos porque querían violar en grupo sino porque SU PECADO fue CONTINUO Y CONSTANTE; Dios no los juzgó por un solo acto aislado. Ya pensaba en destruir la ciudad AÚN ANTES del intento a violación.
  • Sodoma y Gomorra no fueron destruidos por falta de hospitalidad, sino porque su pecado era GRAVE EN EXTREMO y el resto de la Biblia aclara que fue un asunto de homosexualidad.

En suma, para contestar la pregunta inicial -¿Por qué fueron destruidos Sodoma y Gomorra?- por las razones explicadas arriba sería mucho más honesto a nivel intelectual y hermenéutico seguir aferrándonos a la postura evangélica tradicional, esto es, que Sodoma y Gomorra fueron destruidos por la inmoralidad sexual (homosexualismo).

Will Graham.

martes, 11 de agosto de 2015

EL MES SÉPTIMO

(Ser la Casa Espiritual de DIOS,  ser SU Tabernáculo)
Y habló Jehová a Moisés, diciendo:
  Habla a los hijos de Israel y diles:
A los quince días de este mes séptimo será la fiesta solemne de los tabernáculos a Jehová por siete días.
  El primer día habrá santa convocación;
ningún trabajo de siervos haréis.
  Siete días ofreceréis ofrenda encendida a Jehová el octavo día tendréis santa convocación, y ofreceréis ofrenda encendida a Jehová es fiesta, ningún trabajo de siervos haréis.
  Estas son las fiestas solemnes de Jehová, a las que convocaréis santas reuniones, para ofrecer ofrenda encendida a Jehová, holocausto y ofrenda, sacrificio y libaciones, cada cosa en su tiempo,
  además de los días de reposo de Jehová, de vuestros dones, de todos vuestros votos, y de todas vuestras ofrendas voluntarias que acostumbráis dar a Jehová.
  Pero a los quince días del mes séptimo, cuando hayáis recogido el fruto de la tierra, haréis fiesta a Jehová por siete días; el primer día será de reposo, y el octavo día será también día de reposo.
 Y tomaréis el primer día ramas con fruto de árbol hermoso, ramas de palmeras, ramas de árboles frondosos, y sauces de los arroyos, y os regocijaréis delante de Jehová vuestro Dios por siete días.
  Y le haréis fiesta a Jehová por siete días cada año; será estatuto perpetuo por vuestras generaciones; en el mes séptimo la haréis.
  En tabernáculos habitaréis siete días;
 todo natural de Israel habitará en tabernáculos,
  para que sepan vuestros descendientes que en tabernáculos hice yo habitar a los hijos de Israel cuando los saqué de la tierra de Egipto. Yo Jehová vuestro Dios.
(Levítico 23:33-43)
   Había ciertas fiestas en Israel que eran necesarias, y el pueblo tenía que asistir a ellas. Y si bien no llegamos a entender qué significan hoy todas aquellas fiestas para nosotros, sí creo que tenemos una medida de luz en cuanto a la aplicación personal que ellas puedan tener para nuestras vidas.

   Así nos encontramos con la salvación, una fiesta llamada Pentecostés, hasta que nos encontramos con una muy especial llamada La Fiesta de los Tabernáculos. Tabernáculo, -recuerda-, es aquello que aún está por manifestarse en forma real en la asamblea.
Es la fiesta que se realiza durante la siega. Y de alguna manera, es el tiempo que estamos viviendo. Que comienza con el sonido de las trompetas, que no son otra cosa que ciertas voces a veces anónimas, a veces muy anónimas, que andan gritando verdades por allí.
Las trompetas emiten distintos sonidos por causa del idioma. Por eso hay trompetas doradas, trompetas de plata y de otros materiales fuertes, pero lo cierto, real y genuino, es que todas están haciendo un ruido más que considerable.

   Y es muy importante que sepas en este momento, que la trompeta en la Biblia, siempre significa cambio de dirección. Cuando Juan oye una voz como de trompeta, y ve a uno parecido al Hijo del Hombre en medio del candelero, en Apocalipsis capítulo 1, él inmediatamente sabía que, lo que se estaba diciendo, significaba cambio.

Ya fuese para congregarse, ya fuese para ir a la guerra o ya fuese para movilizarse de un campamento a otro, la trompeta siempre significaba cambio de posición. Estamos por reunirnos, por ir a la guerra o por transicionar, pero siempre significaba cambio.

   Y la Fiesta de los Tabernáculos comienza con la Fiesta de las Trompetas. Si miras con atención a tu alrededor, y sales un poco de ciertas vendas mágicas desparramadas por allí, podrás darte cuenta que la Fiesta de las Trompetas ya se está celebrando.
   Hay decretos, hay palabras que han sido depositadas, y por encima de eso, se está declarando a los principados y potestades, que existe una Asamblea gloriosa que va a emerger y que no piensa tomar ningún tipo de resultado extraño como contestación.
Quiero leer algo en el Libro del profeta Nehemías. Y cuando lo esté haciendo, voy a estar extrayendo conceptos, voy a estar usando la Biblia como un pedazo de tecnología, y quiero usar un lugar llamado Nehemías en el mundo del Espíritu, y extraer de Nehemías los principios para tener la mentalidad adecuada para construir las vías por las cuales Cristo pueda regresar.

   ¿Cuál es la mentalidad que debemos poseer? ¿Qué identifica el tiempo? ¿Cuál es la posición y el carácter de la asamblea en esta jornada espiritual? Hay un mes en el espíritu que ha sido denominado como el séptimo, y es un mes que demanda cambio de vida. 

   Si tú venías viviendo de cierta manera durante los meses anteriores, cuando entras en el séptimo, para poder prevalecer, necesitas o es requisito, tener ciertas características que no eran necesarias en el mes anterior, es decir, en el mes sexto.
O sea: cada vez que nos acercamos más al fin, se pone más fuerte la batalla. Y requiere de una diferente dinámica para prevalecer. El esfuerzo que te ayuda a prevalecer durante el mes sexto, no es suficiente para prevalecer en el mes séptimo.


   Hace falta otro modo de pensar, otra dinámica. Y quiero que en este trabajo tengas muy en cuenta que, cuando yo vaya a través de la Escritura que vamos a examinar, y mencione que este es el día de tal o cual cosa, lo haré para que tú en voz baja pero audible, digas para tus adentros, ¡Ese soy yo!
Esa es la mentalidad, esa es esta generación. Así es, Señor. Y si no lo es, para allá voy. Lo acepto, lo recibo, lo imparto a mi vida. Lo recibo como tu palabra. Es la mentalidad adecuada para  ese literal y simbólico mes en el espíritu.

(Nehemías 7: 73) = Y habitaron los sacerdotes, los levitas, los porteros, los cantores, los del pueblo, los sirvientes del templo y todo Israel, en sus ciudades. (Nota claramente, que todos los niveles sociales vivían en ciudades.


   Eso es lo importante, olvídate qué posición tenían. Pero la posición, muchas veces, declara el nivel social de la persona. Todos los niveles sociales vivían en ciudades. Y esto es importante, porque la primera ciudad fue construida por Caín. En Génesis 4:16, vemos como Caín funda la primera ciudad en total rebelión a Dios.
Dios dijo que él sería errante, pero él dijo que no pensaba errar nada y se quedó cristalizado y puesto en un solo lugar. Y creó la primera ciudad. La ciudad es creada fuera de la presencia de Dios. Porque Caín cuando la funda, la funda fuera de la presencia de Dios.

   Dios echó a Caín de su presencia, y es fuera de su presencia que él construye la primera ciudad. Entiende: no es pecado vivir en la ciudad, pero sí es pecado ser arrebatado por ella. Ser arrebatado por el espíritu pagano de la ciudad. No se camina a la misma velocidad en una ciudad que en el campo.
En una época viajaba mensualmente a la capital de mi país por trabajo. En esa época yo vivía en un a población más pequeña que la que vivo hoy. ¿Y sabes qué? Volvía extenuado. Y eso que era bien joven y más que dinámico. Pero el ritmo de una ciudad es otro, mucho más acelerado.

   Una persona arrebatada por el espíritu de la ciudad, no puede ser utilizada casi en nada por Dios. Tú debes vivir donde puedas o donde quieras, pero debes saber que la ciudad es mucho menos propicia que el campo o las poblaciones pequeñas para sentir o ver a Dios. Se nos hace más que difícil ver a Dios en el concreto y el asfalto.
Si vamos al campo y vemos un árbol o una montaña, allí sí estamos viendo la obra de Dios. La naturaleza nos describe a Dios; el cemento no. Se buscan las ciudades porque son más industriales y en general circula más dinero, pero se paga un precio por ello.

   Y resulta ser que ellos tenían un estilo de vida, justo cuando comienza el séptimo mes. Todo el mundo vivía en el estilo de vida llamado: ciudad. Todo el mundo andaba en la misma. Vivían en el mismo estilo de vida. Y leemos una vez más el mismo verso:

Y habitaron los sacerdotes, los levitas, los porteros, los cantores, los del pueblo, los sirvientes del templo y todo Israel, en sus ciudades. Venido el séptimo mes, los hijos de Israel estaban en sus ciudades. (Aquí vemos la ley de doble referencia, donde Dios cuando quiere enfatizar algo en la Escritura, te lo dice dos veces corridas. Aquí quiere enfatizar que esta gente vivía en este estilo de vida.)

(Nehemías 8: 1) = Y se juntó todo el pueblo como un solo hombre en la plaza que está delante de la puerta de las Aguas, y dijeron a Esdras el escriba que trajese el libro de la ley de Moisés, la cual Jehová había dado a Israel.


   Nota que tan pronto llega el séptimo mes, se congregan como un solo hombre. Es el día de la unidad. Vemos que es el día de compromiso, donde el espíritu de independencia es cortado. Donde todo se hace corporalmente. Donde el próximo mover de Dios no va a ser a través de un solo ministerio, o a través de un solo evangelista internacional, sino a través del cuerpo de Cristo en la tierra.

   Un cuerpo trabajando unido. Cuando llega el séptimo mes, el estilo de vida comienza a cambiar. Es el día de hambre por la palabra. Lo primero que demandan, es: traed el libro. Dadme la palabra. Nota que el séptimo mes, no es un día de manifestaciones externas; es un día de concentración de la Palabra.


   Tan pronto llegó el séptimo mes, demandaron el libro de Esdras. “¡Esdras! ¡Trae el libro! ¡Queremos entender la palabra!” Es el día de hambre de la palabra. El séptimo mes, el cual estamos desandando en nuestra tierra, es el Día de la Fiesta de los Tabernáculos en la tierra, es el día de la lluvia tardía, es el día de la cosecha.
Llámalo como tú quieras, pero la mentalidad y los principios que estamos extrayendo, describe a la gente que vive adecuadamente dentro del tiempo. O sea: gente capaz de discernir claramente el tiempo en el que vive, y vive una vida adecuada para este tiempo.

   Es un tiempo de cuerpo corporal, donde todo el poder de Dios regresa donde están sus hijos genuinos, a veces, sin siquiera pasar por las organizaciones tradicionales, no importa la trayectoria y el prestigio que tengan cualquiera de ellas.


   ¡Trae la Palabra! No quiero que ores por mí, ¡Quiero Palabra! Seguimos leyendo. Nota el cambio drástico que hay entre el verso 73 del capítulo 7 y el primer verso del capítulo siguiente. Y lo único diferente, es que cambió el mes, y toda la gente reaccionó diferente.

(Verso 2) = Y el sacerdote Esdras trajo la ley delante de la congregación, así de hombres como de mujeres y de todos los que podían entender, el primer día del mes séptimo.
Es el día de intelecto. Es el día de entendimiento. No está permitido ser ignorante, cuando estamos viviendo en un tiempo de información global. No hay excusa para la ignorancia. Si hay ignorancia, prepararse, vivimos en el séptimo mes. Es el tiempo de demandar cero ignorancias en la asamblea.

   Cero ignorancias en nuestras empresas. Es tiempo de sabiduría. Está escrito que la sabiduría aumentará. Y no dijo que fuese del diablo, dijo que la sabiduría aumentaría. De hecho, el tiempo que estamos viviendo, facilita el conocimiento. No hay excusas para no entender. Aquí es donde podemos pensar y hasta decir en voz alta: ¡Ese soy yo!


(Verso 3) = Y leyó en el libro delante de la plaza que está delante de la puerta de las aguas, desde el alba hasta el mediodía, (¡Desde el alba hasta mediodía! ¿Te imaginas una reunión en tu congregación de esa duración?) en presencia de hombres y mujeres y de todos los que podían (¿De todos los que podían hacer qué cosa? Entender. Nota como re-enfatiza entendimiento.) entender, y los oídos de todo el pueblo estaban atentos al libro de la ley.
Estaban atentos al libro de la ley. Este es el tiempo del discernimiento, de atender, de no ponerse a volar y cazar pajaritos cuando oyes la Palabra. Ni siquiera parpadear cuando entras al espíritu de la Palabra. No interesa cuánto dure el estudio, tú ni te mueves de donde estás.


   Aprende esto: cuando alguien se incomoda, se fastidia y se cansa del mensaje o su duración, es gente que jamás entró en el espíritu del mensaje. A mí me ha pasado, no sé si te pasa a ti: cuando entras en la dimensión espiritual de un estudio o mensaje, ni cuenta te das del tiempo. Día de discernimiento, día que te demanda entender, día donde la gente está atenta, no se dispersa, no vuela.


(Verso 4) = Y el escriba Esdras estaba sobre un púlpito de madera que habían hecho para ello, y junto a él estaban Matatías, Sema, Anías, Urías, Hilcías y Maasías, su mano derecha, y a su mano izquierda, Pedaías, Misael, Malquías, Hasum, Hasbadana, Zacarías y Mesulam.
(5) Abrió, pues, Esdras el libro a ojos de todo el pueblo, porque estaba más alto que todo el pueblo; y cuando lo abrió, todo el pueblo estuvo atento.

   El día de sumisión, donde todo el mundo está por debajo del nivel de la Palabra. La Palabra es más alta que la gente. Si la Palabra no resuelve tu problema, más vale que te vayas comprando un ataúd, porque nadie te lo va a resolver. La Palabra siempre está por encima de tu problema.


   El día de sumisión, donde la Palabra estaba elevada por sobre la gente. Vemos ahí una plataforma gubernamental; vemos que hay un elemento de gobierno en la Palabra. Porque cuando tú ves en la escritura que el que está hablando tiene gente a la izquierda y a la derecha, es que tiene una plataforma gubernamental.
La Palabra del séptimo mes trae consigo gobierno, autoridad. Es una Palabra de un Espíritu diferente. Estamos expresando las condiciones espirituales, los caracteres personales; estamos hablando de la mentalidad que es apropiada para fluir adecuadamente durante este tiempo, llamado La Fiesta de los Tabernáculos.

   Y dice el verso 5, al final, que cuando se abrió el libro el pueblo estuvo atento. Allí la Palabra implica que se puso en pie, o tomó su lugar. Vemos aquí el día del temor y sensibilidad. Temor a la Palabra, reverencia. O sea: no estamos hablando de un culto o de un rito, sino que esta gente cuando oyeron la Palabra, inmediatamente cambiaron su postura espiritual.

   Hoy en día nosotros tenemos lo que yo llamo con cierto humor “porristas cristianos”, tratando de darle algunos latigazos a la "iglesia" para que adore, para que ore, para que cante, para que crea. Y así y todo, no entramos. Pero ellos entraron en un abrir y cerrar de ojos.
En un momento llegaron de afuera, donde están todos los demonios de Babilonia, simplemente abrieron el libro y listo; en la presencia de Dios. Cuando la gente trae una sensibilidad tal que, en un abrir y cerrar de ojos, cambian de lo natural a lo espiritual.


   No necesitan de cuatro horas con porristas espirituales dándole latigazos para que adoren. ¡Es que no vengo bien! ¡¡Mejórate antes de entrar!! Escucha: si tú no traes a Dios contigo cuando llegas a tu congregación, retorna, porque allí no lo vas a encontrar.
El lugar de tu congregación es madera, cristal, alfombras. Dios no habita en nada de eso. Todavía queda un poco de religión por allí destrúyela. En el Nuevo Testamento no hay altares. Sería sano, entonces, decir que altar, hoy, no es bíblico.


   Es que no hay altares en el Nuevo Testamento. El altar se destroza cuando Israel cambia al Nuevo Testamento. Ahora, el altar es el corazón del hombre. Las plataformas que tú conoces, son necesarias para una dudosa visibilidad, pero de ninguna manera es santa.

(Verso 6) = Bendijo entonces Esdras a YHWH, Dios grande, y todo el pueblo respondió ¡Amén! ¡Amén! Alzando sus manos; y se humillaron y adoraron a YHWH inclinados a tierra.  (Fíjate; sólo fue abrir el libro, y ellos entraron en adoración.)
(7) Y los levitas Jesúa, Bani, Serebías, Jamín, Acub, Sabetai, Hodías, Maasías, Kelita, Azarías, Jozabed, Hanan y Pelaia, hacía entender al pueblo la Ley; y el pueblo estaba atento en su lugar.


   Esa frase que leemos como que estaban atentos en su lugar, significa decir que estaban presentes. Fue como decir: la dimensión o el perímetro espiritual que tú llenas con la gracia que tú tienes como persona en Cristo, estaba llena diciendo: el día de disponibilidad usadme.

En el mes séptimo, todo el mundo tomó su lugar. En el mes sexto, quizás estaba bien si no lo hacías, pero ahora empieza a estar mal si te queda sentado mirando hacer a los demás. Usadme. Todo el mundo atento; usadme.


   Es el día de disponibilidad. Aquí también puedes decir: ¡Ese soy yo! Ahora, claro; una cosa es que Dios te use, y otra muy diferente que te usen ciertos hombres inescrupulosos que no faltan en nuestros ambientes, ¿Verdad? Entonces pide ambas cosas al unísono. Dile a Dios que te use y que te discernimiento para saber con certeza cuándo es Él quien te usa.


(8) Y leían en el Libro de la Ley de Dios claramente, y ponían el sentido, de modo que entendiesen la lectura.
Nota la diferencia del desplazamiento de la Palabra en el séptimo mes. Primero, dicen que leían la Palabra de Dios, claramente. No teológicamente; ¡Práctico! Te comparto un estudio, te doy tres principios. ¿Qué haces tú? Lo escuchas y me dices ¡Qué bueno! ¿Bueno? ¿Y entonces qué haces allí adulándome, en lugar de salir corriendo a poner en práctica el principio número uno?

   Leían la Ley de Dios claramente, y le ponían el sentido de modo que se entendiese. O sea: era obligatorio entender. Estamos viviendo un tiempo en donde la ignorancia no es aceptable. -¡Es que no entiendo! – ¡Aplícate! En lugar de quejarte, ¡Estudia! ¡Escudriña! ¡Ora, pide sabiduría, haz algo!

“Es que sigo sin entenderte”… ¡Vuelve a leer las Sagradas Escrituras tantas veces necesites hasta que lo entiendas! No son jeroglíficos egipcios, es la Palabra de Dios. ¡Tienes al Espíritu Santo morando en ti, enseñándote todo lo que ignoras y guiándote a toda verdad! ¿O no lo tienes?

   Dice que hacían que el pueblo entendiera. Era requisito en el tiempo final, tener el principio témpano. Poco visible por fuera, bajo perfil; enorme por debajo de la superficie. ¡Entendí! Hay mucha gente que corre con el mensaje, pero no lo aplica a sus vidas. Déjame decirte que si no lo has aplicado a tu vida, es porque no has entendido.


   Será requisito entender. Día de claridad. Día de entendimiento de la Palabra. Y no estamos hablando de Nehemías, estamos hablando de la gente que vive adecuadamente en el tiempo final. Esta es la mentalidad adecuada para el mes séptimo.
Este es lo que yo diría, el lugar llamado Nehemías en el Espíritu. Y nos está diciendo lo que es necesario hacer para celebrar la Fiesta de los Tabernáculos. Porque si no la celebras, no hay siega. Y eso es un problema, porque si no hay siega, no hay Cristo.


   O sea que esto es necesario, porque Cristo llega durante la Fiesta de los Tabernáculos. Pero aquí estamos viendo que la Fiesta de los Tabernáculos tenía requisitos para celebrarse. No puedes entrar como te dé la gana. Estás invitado, pero debajo dice: “Ropa formal”. No puedes venir en camiseta. Había que tener cierta mentalidad para participar de los Tabernáculos. No podías hacerlo desorganizadamente, tenías que fluir como aquello que ya estaba escrito.

(Verso 9) = Y Nehemías el gobernador, y el sacerdote Esdras, escriba, y los levitas que hacían entender al pueblo, dijeron a todo el pueblo: Día santo es a Jehová nuestro Dios; no os entristezcáis, ni lloréis; porque todo el pueblo lloraba oyendo las palabras de la ley.

   Nota la reacción que el pueblo trajo al mes séptimo. Era la reacción de los primeros meses. Del mes seis al séptimo. Cuando leían la Palabra, cuando el pueblo se daba cuenta que se habían alejado mucho de lo que era la verdad; cuando escuchaban la Palabra, se entristecían.
Porque decían: ¡Dios mío! ¡Cuánto nos falta! Hay un mundo de distancia entre esa palabra y donde estoy yo. Y la gente salía triste, porque calculaban el costo y decían; no sé si podré pagarlo. Esa era la reacción normal. Pero en el mes séptimo, es el tiempo que demanda una reacción diferente.


(10) Luego les dijo: id, comed grosuras, y bebed vino dulce, y enviad porciones a los que no tienen nada preparado; porque día santo es a nuestro Señor; no os entristezcáis, porque el gozo de YAHWEH es vuestra fuerza.

   Es el día que demanda una reacción diferente ante la Palabra de Dios. Ellos, cuando oían la Palabra claramente y la entendían, se tiraban de los pelos y decían: ¿Y ahora cómo hago esto? Escucha: reacciona diferente, porque el gozo de YAHWEH es tu fortaleza.
No te está dando fuerza con algo llamado gozo. Léelo en contexto, y verás que lo que te está diciendo es: No respondas con tristeza; responde con fuerza, porque a Dios la fuerza le trae gozo. El gozo de YAHWEH, es cuando tú respondes con fuerza.

   El gozo de YAHWEH, es tu fortaleza. El gozo de Dios es cuando tú te haces fuerte en la palabra. Y entiende bien; el gozo, no es una sonrisa armada y casi ridícula en la cara de un creyente carismático. El gozo tampoco es quedar tendido en el suelo riendo a carcajadas. A eso, se le llama risa.
El gozo es una condición del hombre interno. El gozo es producto de una convicción absoluta de que Dios es Dios y nadie le vence. El gozo es una demostración positiva de quién es Dios en la tierra. El gozo es una fuerte actitud ante la vida que puede atacar todas las circunstancias y acosos.
El gozo es una actitud prevaleciente del espíritu del hombre. El gozo es una cultura de sed insaciable por su palabra. El gozo es un carácter que confronta todo lo que está en contra del avance del propósito de Dios. Es una postura interior.


Es el día de una nueva reacción ante la palabra. Ya no hay excusas para no entender. ¡Tienes que entender! Y si entiendes, serías fuerte. De allí que, cuando nos vamos tristes, es porque no hemos entendido. Porque cuando entiendes, no te entristeces. Sólo dices: ¡Gracias a Dios, ahora tenemos un objetivo hacia el cual caminar!
(11) Los levitas, pues, hacían callar a todo el pueblo, diciendo: callad, porque es día santo, y no os entristezcáis.
(12) Y todo el pueblo se fue a comer y a beber, y a obsequiar porciones, y a gozar de grande alegría, porque habían entendido las palabras que les habían enseñado.


   Es el día de dádiva; no es el día de venir a buscar nada a un templo. Además, aquí te queda claro que es cuando entiendes que se te produce fuerza. Lo que te trae fuerza no es el gozo. Dios se goza cuando tú entiendes su Palabra, porque es ella la que te produce fuerza.
Entender es lo que te fortalece. Una persona que entiende, camina la tierra con autoridad. Y dice que habían aprendido las Palabras que les habían enseñado. No predicado, enseñado. A la asamblea no se le predica; a la asamblea se le enseña.


(13) Al día siguiente se reunieron los cabezas de las familias de todo el pueblo, sacerdotes y levitas, a Esdras el escriba, para entender las Palabras de la Ley. (¿Para qué te dice que se reunieron? Para entender. ¡Quince veces te ha dicho que el mes séptimo es un día de entendimiento! Es inexcusable no entender.)


(14) Y hallaron escrito en la Ley que YAHWEH había mandado por mano de Moisés, que habitasen los hijos de Israel en tabernáculos en la fiesta solemne del mes séptimo.

   Aquí vemos que demanda un nuevo estilo de vida. Recuerda que todo el mundo vivía en ciudades. De repente, ahora, todo el mundo tiene que vivir en el campo y dormir en tiendas móviles. Imagínate que fuerte que tiene que haber sido salir un día de una casa en una ciudad, y al día siguiente encontrarte durmiendo en una choza en el medio del campo.
Así de drástica es la exigencia del cambio mental para la congregación. Solo imaginarte qué tipo de transición sería mudarte de una casa en una ciudad y acomodarte en una tienda de indios. Así de drástico y de inquietante es el cambio de mentalidad de este tiempo de mes séptimo.

   Del mes seis, al mes siete. Por eso es que la "iglesia" suele rechazar este mensaje. Créeme, existen demonios corporales. ¿Sabes lo que es un demonio corporal? Cuando toda una "iglesia" está influenciada por el mismo demonio y no lo saben. Ni cuenta se dan.

(15) Y que hiciesen saber, y pasar pregón por todas sus ciudades y por Jerusalén, diciendo: salid al monte, y traed ramas de olivo, de olivo silvestre, de arrayán, de palmeras y de todo árbol frondoso, para hacer tabernáculos, como está escrito.

   En el mes séptimo, se predica cambio. Predicar esto, pregonar esto en todas las ciudades. Que hay que cambiar el estilo de vida; el mensaje del mes séptimo, es reforma. Pregonar que hay un cambio de estilos de vida, que hay un cambio de estructuras pensantes, hay un cambio en la forma de llevar un ministerio en el mes séptimo. Pregonar esto, dice la Palabra de Dios.
Y luego, cuando menciona cronológicamente las ramas de olivo, olivo silvestre, arrayán o mirto, palmeras y todo árbol frondoso, te está dando los cinco componentes para construir la mentalidad del séptimo mes. Construid una choza con estos cinco ingredientes.

   Y la choza se va a convertir en la cobertura mental de la asamblea durante el séptimo mes. Hay que construir una mentalidad deliberadamente, que prevalezca en el mes séptimo. Y Dios nos da cinco ingredientes a los cuales me voy a referir más adelante, para ver qué mentalidad está prevaleciendo en el mes séptimo.

(16) Salió, pues, el pueblo, y trajeron ramas e hicieron tabernáculos, cada uno sobre su terrado, en sus patios, en los patios de la casa de Dios, en la plaza de la puerta de las aguas, y en la plaza de la puerta de Efraín.


   Dice que cada uno lo hará. Nadie hará las cosas en tu lugar durante el mes séptimo. Nadie será tu cobertura humana, eso no existe. Deberás tener una cobertura divina durante las veinticuatro horas del día. Lo que rige tu vida es lo que te defiende en la calle.
Lo que gobierna tu vida, es lo que te cubre en el momento de la circunstancia. Cuando tú estás en una circunstancia en medio del trabajo, lo que te hace prevalecer, es la forma en que tú piensas. Y la forma en que tú piensas, es lo que te cubre y no la cobertura de tu pastor o tu organización y denominación; esto no existe en las Sagradas Escrituras.

   Y esos principios que desarrolla tu mentalidad, provienen de Jesucristo (Yahshúa), por lo que Jesucristo debe ser tu Cobertura. Y no importa por intermedio de quien o de qué la recibes. Tu cobertura es el emisor, no el mensajero.
Porque tabernáculo es mucho más que una antigua tienda o Cristo mismo, desde lo simbólico. Tabernáculo es una mentalidad que te cubre durante el mes séptimo, que tiene que ser formada por estos cinco ingredientes. Y dice que cada uno tiene que tenerla. Aquí puedes decir otra vez: ¡Ese soy yo!
Y observa que ellos hicieron todo esto en sus patios, en los patios de la casa de Dios, en las plazas, en todos lados. Pero menos en sus previas coberturas. Esto es: menos dentro de tu anterior casa. Tú no puedes construir tu nueva mentalidad llamada tabernáculo dentro de la anterior.


   Tenía que ser encima de la casa, o afuera en el patio, o afuera en el frente, o allá en la puerta de la ciudad. Pero la choza tenía que ser algo externo y superior a lo anterior, a lo previo. No construyas la tienda, y métela dentro de tu casa.
Entiende: fundamento apostólico, es protons. Dice1 Corintios 12:28 que Él colocó protons en la asamblea, el fundamento apostólico, primero. No hay un segundo sin un primero. No puedes edificar columnas sin fundamentos básicos.

El Tabernáculo, la mentalidad que DIOS quiere construir destruye el odre previo. Es más fuerte, te ayuda a prevalecer en los tiempos finales. Si DIOS viene mañana, nos interrumpe y nos vamos. Pero si todavía no viene, entonces prevalecemos mientras regresa.


Jenny y Hugo G.

EFECTOS DE LA LUZ

 
   A través de la historia el hombre se ha interesado y evolucionado en el desarrollo de la iluminación; comenzó con el fuego y pasando por las lámparas de aceite y la iluminación a gas llegó a la luz eléctrica, la cual actualmente se perfecciona en función del rendimiento, los costos y los efectos que ésta puede producir para mejorar la calidad de vida. Por ejemplo, varias empresas de este rubro trabajan para producir sistemas en correspondencia con el ciclo circadiano ( es el reloj biológico interno que nos dice cuándo despertar y cuándo dormir; abarca 24 horas, divididas aproximadamente en ocho para el sueño y dieciséis para la vigilia). Es decir, se producen artefactos lumínicos que ayuden a compensar esa falta de luz natural que el cuerpo necesita para tener un ritmo biológico equilibrado y también se tienen en cuenta los efectos psicológicos y emocionales que pueden producir la insuficiente exposición a la luz solar y la inadecuada luz artificial.
 
   Algunos estudios realizados sobre los efectos de la luz en el ser humano concluyen en que si la luz puede mejorar la calidad de vida de las personas, entonces es importante seguir avanzando en la investigación en este campo y todas las inversiones valdrán la pena.
¡Qué importancia que tiene la luz! ¡Cuán necesaria es una buena calidad de iluminación para mejorar la vida del ser humano! Es fundamental que como cristianos no perdamos de vista la importancia de la luz, pues nosotros mismos hemos sido llamados por Jesús a ser luz.
 
"Vosotros sois la luz del mundo" (Mateo 5:14, RVR 1960).
 
   Al ver los efectos que produce la luz en el hombre y en virtud de la responsabilidad que se nos es asignada al ser llamados luz por Nuestro Señor, deberíamos detenernos a pensar si en realidad cumplimos esa función en nuestro entorno y si logramos producir algún efecto positivo en quienes nos rodean. No quiero hacer aquí referencia solo al plano de las buenas obras, las cuales son indiscutiblemente un reflejo de la vida de Cristo en nosotros, sino también a la luz espiritual que podemos irradiar al que vive en tinieblas.
 
"Para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual resplandecéis como luminares en el mundo" (Filipenses 2:15, RVR, 1960).
 
   Una vida radiante en Cristo (esto no significa reír forzadamente todo el tiempo y estar exento de problemas) puede impactar la calidad de vida de otras personas y llevarlas a que quieran conocer al Sol de Justicia y la principal luz de este mundo.
 
"Mas a vosotros los que teméis mi nombre, nacerá el Sol de justicia, y en sus alas traerá salvación; y saldréis, y saltaréis como becerros de la manada." (Malaquías 4:2, RVR 1960).
 
"Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida" (Juan 8:12, RVR, 1960).
 
   Nosotros hemos sido llamados luz de este mundo porque Jesús es la luz del mundo y Él habita en todos aquellos que le hemos reconocido como el Señor y Salvador de nuestras vidas. Por lo tanto no podemos ignorar esa verdad y hacernos los desentendidos del tema, conformándonos con la queja sobre la situación actual de la sociedad y pronosticando que aún empeorará. La luz no se puede esconder, no se puede guardar, no se puede conformar a este siglo; la luz debe cumplir su función de iluminar siempre y no a veces o según donde se encuentre.
 
   Si las empresas de iluminación se esfuerzan tanto por innovar e invertir sobre los efectos que la luz puede producir en la calidad de vida de las personas, ¿por qué a veces nos cuesta tanto invertir en ese campo?
 
   Hay una sociedad que espera silenciosamente salir de las tinieblas, pero éstas solo se disiparán con la presencia de la luz. ¡Iluminemos!